Contratar la luz con el oligopolio no está de moda
Según se informa en el diario digital NORTES, “No os dejéis seducir por el oligopolio eléctrico”, esto es lo que se llevan las seis empresas del oligopolio eléctrico (Iberdrola, Endesa, Naturgy, Repsol, EDP y Total Energies) cada año de los bolsillos de las personas consumidoras en peajes y cargas:
– “Beneficios caídos del cielo”: 700 millones de euros anuales, por el cobro de toda la electricidad al precio de la más cara de producir.
– “Distribución”: una media de 4.900 millones de euros anuales, por llevar la electricidad hasta los hogares. Uno de los porcentajes más elevados de los peajes, que las empresas de distribución de oligopolio no justifican en su coste real y, por tanto, se desconoce si están cobrando abusivamente por su actividad, como lo confirman algunas estimaciones.
– “Déficit de tarifa”: el oligopolio viene ingresando más de 2.500 millones cada año, desde el año 2000. Otro peaje incluido en la factura de la luz sin que exista ninguna auditoria de los costes reales de producción eléctrica en cada tecnología y por unas supuestas perdidas que nadie se cree, dado que las eléctricas que forman el oligopolio dominan el mercado desde siempre y se lucran de altos precios finales y sobrebeneficios.
– “Pagos por capacidad de respaldo”: compensación de 2.900 millones anuales que pagamos en la factura de la luz, como peaje por tener en la reserva grupos térmicos de carbón y gas, aunque no se requiera de su entrada en actividad, que es lo que ha ocurrido casi siempre desde hace dos décadas. Es decir, las eléctricas cobran la misma retribución funcionen o no funcionen las instalaciones en reserva.
A lo anterior hay que sumar la injusta distribución de los pagos por los señalados peajes y cargas. Mientras los tres grupos de grandes consumidores abonan 9, 13 0 16 euros por megavatio, los y las consumidoras domésticas pagamos 123 euros por megavatio.
En resumen, unos peajes y cargas que les garantizan enormes beneficios extraordinarios y subvenciones a costa del bolsillo de los pequeños consumidores. Tal es así que las empresas del oligopolio eléctrico español obtienen el triple de beneficios que las eléctricas en Alemania. A lo que no es ajeno, ni mucho menos, el complejo entramado normativo creado en complicidad con la presencia en los consejos de administración de las eléctricas de quienes antes aprobaron las normas: tres presidentes de Gobierno, más de 20 ministros y varias decenas de secretarios de Estado.
¿Qué podemos hacer las personas consumidoras para lograr precios justos y la democratización del sistema eléctrico?
Las seis grandes empresas que forman el oligopolio (Iberdrola, Endesa, Naturgy, Repsol, EDP y Total Energies) controlan el 70% de la producción, casi el 100% de la red de distribución y el 90% de la venta final de electricidad, una posición de dominio que para nada nos beneficia a las personas consumidoras. A la ciudadanía nos interesa la merma de ese poder, para lograr una factura de la luz a precios justos y la transformación democrática del sistema eléctrico.
Una vez más, hay que recordar que lo que consumas, a quien se lo compres, es una apuesta por las empresas que quieres. En este caso, según a quién contratemos la electricidad votamos por seguir fortaleciendo a las eléctricas del oligopolio, que obtienen beneficios obscenos manipulando el mercado y seduciendo con engaños, o votamos por cooperativas y comercializadoras independientes y contribuimos a reducir el dominio que ejerce ese oligopolio sobre el sistema eléctrico.
Días atrás se hacía viral en las redes sociales un cartel de una comunidad de vecinos de la ciudad de Barcelona, en la que la presidenta informaba que el Ayuntamiento había puesto en marcha hace dos años una empresa municipal, Barcelona Energía, con la que la comunidad había contratado la electricidad de la escalera y el ascensor, y la diferencia de gasto en electricidad del 2020 con respecto al 2019 había sido un ahorro de 712 euros. Recomendado a las vecinas y vecinos hacer el cambio a nivel individual por tres razones: es pública (no se da dinero a empresas privadas que se lucran con un bien básico); tienen un servicio de asesoramiento que te ayuda a ahorrar y la electricidad que ofrece es de origen renovable. El mensaje de la presidenta de esta comunidad vecinal es fundamental: “SALIR DEL OLIGOPOLIO”.
No todo depende de los poderes públicos y del gobierno. TÚ DECIDES A QUIÉN CONTRATAS EL SUMINISTRO DE ELECTRICIDAD, hoy más que nunca, a quién contrates la luz es un acto tan político como votar: decides si quieres reforzar al oligopolio que te engaña y te tima o, por el contrario, quieres apoyar a una cooperativa o una empresa independiente con compromiso social. En tus manos está aportar tu grano de arena para hacer un poco mejor nuestro país, nuestra sociedad y nuestro planeta.
Más información sobre cooperativas, comercializadoras y tipos de contratos en “Con la luz, las cosas claras”.
¡Tú eres la Unión de Consumidores de Asturias!